4 de agosto de 2013

Lo que vale la pena no es lo de este mundo



Domingo XVIII (C) del tiempo ordinario

"En aquel tiempo, uno de la gente le dijo: ‘Maestro, di a mi hermano que reparta la herencia conmigo’. Él le respondió: ‘¡Hombre!, ¿quién me ha constituido juez o repartidor entre vosotros?’. Y les dijo: ‘Mirad y guardaos de toda codicia, porque, aun en la abundancia, la vida de uno no está asegurada por sus bienes’.

Les dijo una parábola: ‘Los campos de cierto hombre rico dieron mucho fruto; y pensaba entre sí, diciendo: ‘¿Qué haré, pues no tengo donde reunir mi cosecha?’. Y dijo: ‘Voy a hacer esto: Voy a demoler mis graneros, edificaré otros más grandes y reuniré allí todo mi trigo y mis bienes, y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes en reserva para muchos años. Descansa, come, bebe, banquetea’. Pero Dios le dijo: ‘¡Necio! Esta misma noche te reclamarán el alma; las cosas que preparaste, ¿para quién serán?’. Así es el que atesora riquezas para sí, y no se enriquece en orden a Dios’”.

COMENTARIO


La parábola que recoge el evangelio de san Lucas nos muestra lo que, de verdad, será nuestro porvenir si actuamos según y cómo. La verdad que dice Jesús debería hacernos reflexionar acerca de lo que verdaderamente importa.

Dice muy bien este texto que por muchos bienes que acumulemos no tenemos asegurada nuestra vida. Eso ha de venir muy bien para aquellas personas que cifran importante su realidad en lo que tienen y poseen. Sin embargo, bien dice Jesús que nada de lo material importa.

La verdad es bien cierta: nos conviene acumular no para este mundo donde, primero, todo acaba desapareciendo y, segundo, nada de eso nos vamos a llevar al definitivo Reino de Dios (en caso de ir allí, claro). Por eso nos conviene atesorar para el otro mundo que dura, además, para siempre, siempre, siempre. En lo bueno y en lo malo...


JESÚS, muchas veces nos recomiendas que actuemos pensando más en el mundo venidero, la vida eterna, que en este mundo. Sin embargo tantas otras veces hacemos, justamente, lo contrario.



Eleuterio Fernández Guzmán


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