Mt 18, 1-5.10
2 de octubre de 2021
Ser como un niño
1 de octubre de 2021
Rechazar a Dios
Lc 10, 13-16
29 de septiembre de 2021
Con toda claridad
Jueves, 30 de septiembre de 2021
Lc 10, 1-12
Creer sin ver
Jn 1, 47-51
28 de septiembre de 2021
Un ansia desmedida
Lc 9, 51-56
27 de septiembre de 2021
Los que se salvan
Lc 13,22-30
“En aquel tiempo, Jesús atravesaba
ciudades y pueblos enseñando, mientras caminaba hacia Jerusalén. Uno le dijo:
‘Señor, ¿son pocos los que se salvan?’. El les dijo: ‘Luchad por entrar por la
puerta estrecha, porque, os digo, muchos pretenderán entrar y no podrán. Cuando
el dueño de la casa se levante y cierre la puerta, os pondréis los que estéis
fuera a llamar a la puerta, diciendo: ‘¡Señor, ábrenos!’. Y os responderá: ‘No
sé de dónde sois’. Entonces empezaréis a decir: ‘Hemos comido y bebido contigo,
y has enseñado en nuestras plazas’, y os volverá a decir: ‘No sé de dónde sois.
¡Retiraos de mí, todos los agentes de injusticia!’. Allí será el llanto y el
rechinar de dientes, cuando veáis a Abraham, Isaac y Jacob y a todos los
profetas en el Reino de Dios, mientras a vosotros os echan fuera. Y vendrán de
oriente y occidente, del norte y del sur, y se pondrán a la mesa en el Reino de
Dios. Y hay últimos que serán primeros, y hay primeros que serán últimos’”.
COMENTARIO
Querer salvarse no es nada extraño pues
la vida eterna es anhelo de cualquiera que quiera ver a Dios. Por eso aquellos
le preguntan si se salvarán muchos o pocos… para ver si están entre los
elegidos del Creador.
Jesús sabe cómo se entra en el definitivo
Reino de Dios. Lo dice muchas veces a lo largo de su predicación. Y la cosa no
parece fácil pues siempre hace referencia a la dificultad, al a puerta estrecha
que es la del sacrificio y la entrega al prójimo.
Muchos, sin embargo, pareciera que no
comprendan lo que quiere decir el Señor. Y es así porque no comprenden que
importa la misericordia y el amor, la caridad… en suma. Para ellos habrá el
rechinar de dientes… y el llanto.
JESÚS, ayúdanos a ser del grupo de los que entran en el
definitivo Reino de Dios… por haberlo merecido.
Eleuterio Fernández Guzmán
26 de septiembre de 2021
Hacer el bien
Mc 9, 38-43. 45. 47-48
“38 Juan le dijo: ‘Maestro, hemos visto a uno que
expulsaba demonios en tu nombre y no viene con nosotros y tratamos de
impedírselo porque no venía con nosotros.’ 39 Pero Jesús dijo: ‘No se lo
impidáis, pues no hay nadie que obre un milagro invocando mi nombre y que luego
sea capaz de hablar mal de mí.40 Pues el
que no está contra nosotros, está por nosotros.’
41 ‘Todo aquel que os dé de beber un
vaso de agua por el hecho de que sois de Cristo, os aseguro que no perderá
su recompensa.’42 ‘Y al que escandalice
a uno de estos pequeños que creen, mejor le es que le pongan al cuello una de
esas piedras de molino que mueven los asnos y que le echen al mar. 43 Y si tu
mano te es ocasión de pecado, córtatela. Más vale que entres manco en la Vida
que, con las dos manos, ir a la gehenna, al fuego que no se apaga.45 Y si tu
pie te es ocasión de pecado, córtatelo. Más vale que entres cojo en la Vida
que, con los dos pies, ser arrojado a la
gehenna.47 Y si tu ojo te es ocasión de pecado, sácatelo. Más vale que entres
con un solo ojo en el Reino de Dios que, con los dos ojos, ser arrojado a la
gehenna, 48 donde = su gusano no muere y el fuego no se apaga’”.
COMENTARIO
Hay que reconocer que en algunas ocasiones las palabras del Hijo de Dios son duras de escuchas y, es más, aún más
duras de llevar a la práctica. Y las que dice hoy son…
En este texto del Evangelio de San Marcos, Jesucristo nos viene a decir que
aquellos sentidos con los que podemos pecar deben ser eliminados pero no como
alguno puede pensar sino, simplemente, controlados y dominados por nosotros.
Y hay algo terrible de lo que nos habla Cristo: el Infierno, que llama “gehenna”,
que es un lugar donde el fuego no se apaga y el gusano que corroe no muere y donde van a parar las almas que no han sido
capaces, muchas veces, de controlar sus sentidos…
JESÚS, gracias por advertirnos de forma tan clara.
Eleuterio Fernández Guzmán