Mc 4, 35-41
30 de enero de 2021
No tener miedo con Cristo
29 de enero de 2021
Nos lo explica todo
Decía también: '¿Con qué compararemos el Reino de Dios o con qué parábola lo expondremos? Es como un grano de mostaza que, cuando se siembra en la tierra, es más pequeña que cualquier semilla que se siembra en la tierra; pero una vez sembrada, crece y se hace mayor que todas las hortalizas y echa ramas tan grandes que las aves del cielo anidan a su sombra.' Y les anunciaba la palabra con muchas parábolas como éstas, según podían entenderle; no les hablaba sin parábolas; pero a sus propios discípulos se lo explicaba todo en privado."
28 de enero de 2021
No esconder la luz
Mc 4, 21-25
27 de enero de 2021
Sembrar y recoger
Mc 4, 1-10.14-20
"Y otra vez se puso a enseñar a orillas del mar. Y se reunió tanta gente junto a él que hubo de subir a una barca y, ya en el mar, se sentó; toda la gente estaba en tierra a la orilla del mar. Les enseñaba muchas cosas por medio de parábolas. Les decía en su instrucción:
'Escuchad. Una vez salió un sembrador a sembrar. Y sucedió que, al sembrar, una parte cayó a lo largo del camino; vinieron las aves y se la comieron. Otra parte cayó en terreno pedregoso, donde no tenía mucha tierra, y brotó en seguida por no tener hondura de tierra; pero cuando salió el sol se agostó y, por no tener raíz, se secó. Otra parte cayó entre abrojos; crecieron los abrojos y la ahogaron, y no dio fruto. Otras partes cayeron en tierra buena y, creciendo y desarrollándose, dieron fruto; unas produjeron treinta, otras sesenta, otras ciento.'» Y decía: 'Quien tenga oídos para oír, que oiga.'
Cuando quedó a solas, los que le seguían a una con los Doce le preguntaban sobre las parábolas. Él les dijo: 'A vosotros se os ha dado el misterio del Reino de Dios, pero a los que están fuera todo se les presenta en parábolas, para que por mucho que miren no vean, por mucho que oigan no entiendan, no sea que se conviertan y se les perdone.'
Y les dice: '¿No entendéis esta parábola? ¿Cómo, entonces, comprenderéis todas las parábolas? El sembrador siembra la palabra. Los que están a lo largo del camino donde se siembra la palabra son aquellos que, en cuanto la oyen, viene Satanás y se lleva la palabra sembrada en ellos. De igual modo, los sembrados en terreno pedregoso son los que, al oír la palabra, al punto la reciben con alegría, pero no tienen raíz en sí mismos, sino que son inconstantes; y en cuanto se presenta una tribulación o persecución por causa de la palabra, sucumben en seguida. Y otros son los sembrados entre los abrojos; son los que han oído la palabra, pero las preocupaciones del mundo, la seducción de las riquezas y las demás concupiscencias les invaden y ahogan la palabra, y queda sin fruto. Y los sembrados en tierra buena son aquellos que oyen la palabra, la acogen y dan fruto, unos treinta, otros sesenta, otros ciento.''"
26 de enero de 2021
Cumplir la Voluntad de Dios
Mc 3, 31-35
"Llegan su madre y sus hermanos y, quedándose fuera, le envían a llamar. Estaba mucha gente sentada a su alrededor. Le dicen: '¡Oye!, tu madre, tus hermanos y tus hermanas están fuera y te buscan.' Él les responde: '¿Quién es mi madre y mis hermanos?' Y mirando en torno a los que estaban sentados en corro, a su alrededor, dice: 'Estos son mi madre y mis hermanos. Quien cumpla la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre.'"
COMENTARIO
Es cierto y verdad que pudiera parecer que este texto bíblico muestra al Hijo de Dios despreciando, nada más y nada menos, que a su Madre, la Virgen María. Sin embargo, como suele pasar con Jesucristo lo que pasa es, justamente, lo contrario.
Resulta de lo más normal que hubiera mucha gente allí donde Jesucristo acudía a predicar Y es que su fama de santidad y de ser un Maestro que enseñaba con autoridad se había extendido. Por eso ni siquiera María puede llegar, digamos, donde estaba su hijo. Y lo mandan llamar.
Cuando Jesucristo dice que sus hermanos y hermanas son aquellos que cumplen a Voluntad de Dios sabe más que bien que su Madre, María, es una persona que siempre ha cumplido la Voluntad de su Padre del Cielo. Es más, sabe que es, además de él mismo, la única persona que siempre ha hecho eso.
JESÚS, gracias por decir las cosas como han que decirlas.
Eleuterio Fernández Guzmán
25 de enero de 2021
Enviados
Mc 16,15-18
COMENTARIO
Enviados por Cristo
Jesús envía a los que ha escogido. Sabe que es la única manera de
que la Palabra de Dios, que ha venido a recordar y a que se cumpla la Ley del
Creador, debe llegar en boca de los hombres que deben conocerla y amarla.
Creer
Jesús ofrece dos posibilidades a todos aquellos que escuchen que el
Reino de Dios ha llegado. Pueden creer y, entonces, convertir su corazón al
Padre y llevar una vida acorde con su Ley. Entonces, aquellos que así lo hagan,
serán salvados.
No creer
Pero también se puede optar por no creer y seguir con su vida
perdida. Entonces, tal persona no será bautizada, lógicamente y, como es de
esperar y así lo dice Jesús la condenación eterna caerá sobre su alma. Y lo
dice con toda claridad el Hijo de Dios.
JESÚS, propones la Verdad
pero no obligas a aceptarla. Sin embargo, sabemos que es muy importante creer
en Dios. Ayúdanos a no caer en la trampa del Maligno y a seguirte siempre como
Hijo de Dios.
Eleuterio Fernández Guzmán
24 de enero de 2021
Y le siguieron
Mc 1, 14-20
“14 Después
que Juan fue entregado, marchó Jesús a Galilea; y proclamaba la Buena Nueva de
Dios: 15 ‘El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca; convertíos y
creed en la Buena Nueva.’ 16 Bordeando el mar de Galilea, vio a Simón y Andrés,
el hermano de Simón, largando las redes en el mar, pues eran pescadores. 17 Jesús les dijo: ‘Venid
conmigo, y os haré llegar a ser pescadores de hombres.’ 18 Al instante, dejando
las redes, le siguieron. 19 Caminando un poco más adelante, vio a Santiago, el
de Zebedeo, y a su hermano Juan; estaban también en la barca arreglando las redes; 20 y al instante los
llamó. Y ellos, dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, se
fueron tras él.”
COMENTARIO
Al
parecer, la señal según la cual la predicación del Hijo de Dios debía dar
comienzo fue el prendimiento de Juan el Bautista. Y Jesucristo, que lo sabía
más que bien, empezó a llevar a cabo su labor evangelizadora.
Como
podemos suponer, en cuanto a hombre, Jesucristo necesitaba de otras personas
que multiplicasen la evangelización y transmitiesen, lo más rápido posible, la
Buena Noticia. Y los escoge, según su leal saber y entender.
Resulta,
cuanto menos, curioso, la reacción de aquellos a los que Jesucristo va
llamando. Y es que no se hacen los remolones sino que, dejando lo que tienen en
sus manos, lo que son y lo que han sido, lo dejan todo y van con Él. Y es que
Jesucristo debía convencer sólo con la mirada que llegaba el corazón.
JESÚS, gracias por haber elegido a los Apóstoles según tu
corazón.
Eleuterio Fernández Guzmán