Lc 12, 40-53
"En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: 'He venido a encender fuego
en el mundo, ¡y cómo querría que ya estuviera ardiendo! Tengo que pasar
por una terrible prueba ¡y cómo he de sufrir hasta que haya terminado!
¿Creéis que he venido a traer paz a la tierra? Pues os digo que no, sino
división. Porque, de ahora en adelante, cinco en una familia estarán
divididos, tres contra dos y dos contra tres. El padre estará contra su
hijo y el hijo contra su padre; la madre contra su hija y la hija contra
su madre; la suegra contra su nuera y la nuera contra su suegra'."
COMENTARIO
Como
bien sabemos, es cierto y verdad que el Hijo de Dios era/es más que
bueno. Sin embargo, eso no quiere decir que no dijera las cosas como
debían ser dichas. Y eso es lo que hace en este texto del Evangelio de
San Lucas.
Jesucristo
no había venido al mundo a pasar el rato en una propiedad de Dios. No.
Había venido a que el mundo se salvase y para eso debía cambiar muchas
cosas de sitio y muchos corazones también.
Ciertamente,
lo que aquí nos dice Cristo es muy duro: había venido a traer fuego al
mundo pero era un fuego purificador. También había venido al mundo para
que hubiera división entre quien creyese en Él y quien no creyese en el
Enviado de Dios. Y es tan verdad que hoy mismo sigue pasando eso...
JESÚS, gracias por decir las cosas como deben ser dichas.
Eleuterio Fernández Guzmán
No hay comentarios:
Publicar un comentario